
El virus de la hepatitis C puede permanecer oculto
Resuelven el misterio de cómo se esconden virus mortales en humanos
El virus puede permanecer oculto mientras hace copias de sí mismo para infectar nuevas células
Investigadores de la Universidad de Copenhague han resuelto un viejo enigma sobre cómo el virus de la hepatitis C evita las defensas inmunitarias del cuerpo humano. Se estima que 50 millones de personas en todo el mundo están infectadas con hepatitis C crónica. El virus de la hepatitis C puede causar inflamación y cicatrización del hígado y, en el peor de los casos, cáncer de hígado. La hepatitis C fue descubierta en 1989 y es uno de los virus más estudiados del planeta. Sin embargo, durante décadas, ha sido un enigma cómo logra evadir el sistema inmunológico humano y propagarse por el cuerpo.
Un nuevo método para examinar muestras de virus ha llevado a los investigadores de la Universidad de Copenhague y el Hospital Hvidovre a la respuesta: el virus simplemente se pone una 'máscara'. Este resultado puede, además, tener un impacto en la forma en que rastreamos y tratamos las enfermedades virales en general.
En el estudio, que acaba de ser publicado en la revista científica Nature, los investigadores explican que al ponerse el virus una máscara puede permanecer oculto mientras hace copias de sí mismo para infectar nuevas células. La máscara encubre el virus en forma de una molécula que ya está en nuestras células. Disfrazado por la molécula, nuestro sistema inmunológico confunde el virus con algo inofensivo a lo que no es necesario reaccionar.
«Cómo el virus de la hepatitis C logra esconderse en nuestras células hepáticas sin ser detectado por el sistema inmunitario siempre ha sido un misterio. Nuestra revelación de la estrategia de enmascaramiento del virus es importante, ya que podría allanar el camino para nuevas formas de tratar infecciones virales. Y es probable que otros tipos de virus usen el mismo truco», dice el profesor asociado Jeppe Vinther del Departamento de Biología, quien junto con el profesor asociado Troels Scheel y el profesor Jens Bukh del Programa de Hepatitis C de Copenhague dirigieron la investigación.Otros virus pueden usan el mismo truco
Al igual que el coronavirus y el virus de la influenza, la hepatitis C es un virus de ARN. Su material genético consiste en ARN que debe copiarse una vez que el virus ingresa a su organismo huésped. Se utilizan nuevas copias de ARN para hacerse cargo de nuevas células, y el FAD enmascara un extremo del material genético del ARN.
Según Jeppe Vinther, es realista pensar que otros virus de ARN utilicen técnicas de enmascaramiento similares para propagarse sin ser detectados por los sistemas de control celular. De hecho, los investigadores ya han encontrado otro virus que utiliza la misma estrategia. Y es probable que haya más.
«Todos los virus de ARN tienen la misma necesidad de esconderse del sistema inmunitario y es muy probable que esto sea solo el comienzo. Ahora que estamos en sintonía con este truco, abre la posibilidad de desarrollar métodos nuevos y quizás mejorados de rastrear y tratar infecciones virales en el futuro», concluye Jeppe Vinther.